Florentino Pérez muestra su postura frente al arbitraje de Soto Grado en Mallorca
El trabajo de Soto Grado ha provocado una imponente postura de parte de Florentino Pérez para evidenciar su sentir
Las polémicas en el partido entre el Real Madrid y el Mallorca seguirán dando de qué hablar por mucho tiempo, siendo un encuentro que aparte del empate entre ambos equipos tuvo varias acciones cuestionables y, sobre todo, un arbitraje que dejó mucho que desear.
Junto a la autocrítica que ha tenido el Real Madrid, el propio presidente Florentino Pérez ha dejado en claro su postura frente al arbitraje dado por Soto Grado, mostrándose claramente indignado hacia un árbitro del que considera no realizó de la manera apropiada su trabajo.
Un arbitraje cuestionable
Si bien una de las cosas que más ha dado de qué hablar fue el empate que el Real Madrid consiguió en su debut, las polémicas han ganado terreno con el paso de los días al ser causadas por malas decisiones del árbitro Soto Grado que terminaron afectando al equipo merengue.
Varios jugadores del Mallorca, entre los que destaca Pablo Maffeo, tuvieron varias jugadas donde directamente fueron en contra de los jugadores del Real Madrid, siendo acciones que no fueron penalizadas de manera apropiada o que directamente no recibieron penalización alguna.
Por otro lado, el Real Madrid tuvo un partido muy complicado gracias al cuestionable trabajo de Soto Grado, donde a pesar de aceptar que la plantilla no jugó bien este partido, la indignación de Florentino Pérez hace evidente que el arbitraje tuvo mucho que ver con el resultado.
Las medidas a tomar
Las tecnologías como el VAR fueron diseñadas específicamente para ayudar a facilitar el trabajo del árbitro, pero Soto Grado prefirió ignorar esto para poder brindar, en apenas el debut de La Liga para el Real Madrid, uno de los arbitrajes más cuestionables de la competición.
Esta situación no puede seguir pasando, y a pesar de que no se puede hacer mucho por el empate que se terminó obteniendo, los próximos partidos pueden procurar tener árbitros competentes para evitar polémicas como las que tuvo el club en su encuentro contra el Mallorca.
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