Al-Khelaïfi no se olvida de Mbappé y tensa aún más la cuerda con el delantero

A pesar de que el club asume que la apelación tiene pocas posibilidades de éxito, ha confirmado su intención de recurrir la decisión. En un comunicado enviado a EFE, el equipo presidido por Nasser Al-Khelaifi explicó que, aunque el impacto del recurso podría ser limitado, considera necesario seguir adelante.

El PSG sostiene que su postura va más allá de argumentos legales y que también está relacionada con principios de  "buena fe, honestidad, y respeto a los valores del club y a sus aficionados". En su declaración, el equipo destacó que no quiere abonar los salarios reclamados por Mbappé, correspondientes a los meses de abril, mayo y junio de 2024, así como una parte de la prima de firma.

Argumentan que el jugador incumplió sus compromisos tanto públicos como privados, refiriéndose al supuesto acuerdo en el que Mbappé  habría renunciado a una parte de sus ingresos si abandonaba el club en calidad de agente libre, cosa que finalmente ocurrió en junio.

El comunicado del PSG señala que el contrato original fue modificado de manera legal y cumplido por ambas partes, hasta que Mbappé decidió romper el acuerdo al marcharse. El club parisino está dispuesto a llevar la batalla legal a los tribunales laborales, mientras que la defensa de Mbappé argumenta que el incumplimiento salarial del PSG es evidente. Además de la Liga francesa, el caso ha sido llevado ante la UEFA, y en caso de que el PSG no cumpla con sus obligaciones, podría enfrentarse a sanciones como la prohibición de realizar fichajes.