El regalo más especial que ha recibido hasta ahora Anabel Pantoja por su embarazo
Anabel tiene 37 años y está viviendo uno de los mejores momentos de su vida, su futura maternidad
Anabel ha explicado en sus redes sociales que ha recibido el primer regalo para el bebe. Asistió a la boda de Ana Moya y Diego Conde y ellos le dieron el regalo sorpresa.
En un vídeo en sus stories ha contado que cuando fue a sentarse en su silla, descubrió el regalo, que tanto podrá servir para la mamá como para el bebé. Era un babero de colores.
En la boda se encontró con otra embarazada famosa, Dulceida. Ambas se hicieron una fotografía tocándose la barriga la una de la otra. La próxima que se harán será con sus respectivos bebés en brazos.
El embarazo sigue adelante
Anabel también ha compartido con sus seguidores los cambios que está experimentando por el embarazo. Aunque algunos la criticaron por vender la exclusiva, Anabel ha explicado los motivos por los que la hizo.
Explicó que lo había hecho para ganar dinero para el bebé que espera junto a David Rodríguez y ahora que ya ha pasado el contrato de exclusividad se ha lanzado a hablarles a sus fans de su estado. Les ha confesado que está teniendo un problema que ha tenido que consultar con su médico.
"Seguimos para bingo: la nochentera", escribía la influencer en un primer story en el que adelantaba a sus seguidores una información que ya les había dado anteriormente, que es que está teniendo insomnio durante su cuarto mes de embarazo.
"Se lo comenté al médico porque todo el mundo me decía que por qué no se lo preguntaba al médico, pero el médico me dice que es normal, que no me puede dar una pastilla para dormir", contaba.
"Me molesta también la barriga, el reflujo, el pipí y ya me vuelvo loca y me pongo hasta a llorar porque me quiero dormir", explicaba con cara de cansada.
"Y no solo la cara, es que me cambia todo, ¡estoy de mala leche! Es un horror, no sé si os pasa, pero es que yo por la noche no tengo sueño y a partir de las 06:30, 07:00 siento que no me puedo levantar de la cama".
Aunque ahora está visiblemente frustrada con este problema para el que no tiene solución, es consciente que todo esto lo va a olvidar en el mismo momento en que tenga a su bebe en brazos.
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