Alice Campello destrozada tras la rotura con Álvaro Morata, solo tiene un refugio

Alice, está pasando por un momento muy duro y parece encontrar consuelo en sus hijos y en su entorno cercano. Tras siete años de matrimonio y cuatro hijos en común y esto, sumado a la cantidad de rumores y especulaciones sobre el fin de su relación, está suponiendo un trago complicado para la italiana.

Según la psicóloga Lara Ferreiro ha declarado a la revista ‘Semana’, después de analizar los dos comunicados de la pareja, aclara que Morata, lo tenía todos más digerido que ella.

"Cuando dice que siempre tendrá un lugar en su corazón es una despedida. Dice que probablemente no hay marcha atrás. Él también habla de aprendizajes, esa es la última fase del duelo, cuando ya has aprendido y quieres aplicarlo en otra relación. Es un duelo muy avanzado", explica Lara Ferreiro.

"Ella, refiriéndose a Campello, no dice nada de que hayan reflexionado. Ella dice que es la decisión más difícil, lo que se traduce en dolor. Cuando utiliza la palabra "pronto" puede ser porque ella hubiera esperado más tiempo para anunciarlo. Da la sensación de que ella no quería separarse. Parece algo unilateral". Aclara.

Su único consuelo

Alice ha aparecido en su perfil social, de Instagram compartiendo tres instantáneas de lo más significativas. Son tres fotos de sus hijos y ha añadido un corazón rojo con la frase: "Mi vida entera", unas palabras que indican que ahora, más que nunca, los pequeños son su auténtico salvavidas y centro de su vida.

En exclusiva para el programa 'TardeAR', la empleada del hogar de la pareja rompió su silencio, con el consentimiento de Morata y Campello, para desmentir categóricamente algunos de los rumores que han circulado.

Según la trabajadora, que lleva cinco años al servicio del futbolista y la empresaria, la crisis en la pareja no es reciente.  "Llevan sufriendo una crisis desde hace un año y medio. El desgaste en la relación fue gradual y que ambos hicieron todo lo posible por salvar su matrimonio".

Sobre si su separación es definitiva, la italiana desvela que esto es lo que "necesitan ahora los dos", pero reconoce que no sabe lo que pasará en un futuro, dejando la puerta abierta a una posible reconciliación  porque ante todo hay amor, respeto y admiración de Alice a Álvaro, y de Álvaro a Alice.