Nunca hagas esto con tu coche cuando pongas el aire: lo estás rompiendo

Las temperaturas extremas del verano, que en muchas regiones del país alcanzan entre 35 y 40 grados, hacen que conducir sin aire acondicionado sea una tarea difícil. Mantener en buen estado este sistema es fundamental para garantizar un viaje cómodo y seguro. En este contexto, el Centro Técnico de SEAT  ha publicado un informe que destaca los errores más comunes en el uso del aire acondicionado en los automóviles, errores que pueden afectar su funcionamiento y durabilidad.

Uno de los principales problemas que enfrentan estos dispositivos es el impacto de la humedad y las altas temperaturas, que pueden causar corrosión en componentes esenciales como placas, tubos y condensadores. Por ello, se recomienda realizar una revisión completa del sistema antes de la llegada del verano para detectar y corregir posibles fallos.

Un error común entre los conductores es encender el aire acondicionado inmediatamente después de entrar al vehículo. Los expertos aconsejan ventilar el coche de forma natural primero, abriendo puertas y ventanillas durante al menos un minuto antes de activar el sistema de aire acondicionado. Este proceso ayuda a reducir el calor acumulado en el interior del vehículo y mejora la eficiencia del sistema.

Otro error frecuente es ajustar el aire acondicionado a su máxima potencia tan pronto como se enciende. Esto no solo aumenta el consumo de la batería, sino que también puede provocar un desgaste prematuro del sistema. Los fabricantes recomiendan además cambiar los filtros de aire cada 15.000 o 20.000 kilómetros  para asegurar un funcionamiento óptimo.

Climatizador vs Aire Acondicionado: diferencias y ventajas

Al hablar de sistemas de enfriamiento en el coche, es importante distinguir entre el climatizador y el aire acondicionado. Aunque ambos sirven para mantener una temperatura agradable en el interior del vehículo, operan de manera diferente y ofrecen distintas ventajas.

El climatizador  es más común que el aire acondicionado porque no requiere una salida al exterior y suele ser más económico en cuanto a instalación. Está diseñado para habitaciones pequeñas, mientras que el aire acondicionado, con su mayor alcance, es capaz de enfriar un espacio más amplio.

En los vehículos, el climatizador mezcla aire frío y caliente para mantener una temperatura óptima y una humedad adecuada dentro del habitáculo. Este sistema cuenta con una unidad de control que regula automáticamente la temperatura, la humedad y la distribución del aire, ajustándose según la velocidad del ventilador y las condiciones internas y externas.  La temperatura ideal con un climatizador automático suele estar entre los 21 y 22 grados.

Por otro lado, el aire acondicionado en modo manual permite al conductor seleccionar la potencia del ventilador y ajustar la temperatura según sus preferencias. En rutas largas, se recomienda mantener la temperatura interior del coche entre 19 grados en verano y no más de 24 grados en invierno.

La temperatura ideal para conducir con seguridad

La temperatura dentro del vehículo no solo afecta la comodidad, sino también la seguridad al conducir. Diversos estudios indican que una temperatura interior de 30 grados puede aumentar los errores de conducción en un 20%.  Por eso, aunque es tentador poner el ventilador al máximo para enfriar rápidamente el coche, no es lo más aconsejable.

El uso del climatizador también ayuda a mantener una humedad adecuada dentro del vehículo, gracias a sensores que regulan la temperatura y la humedad de manera precisa. Además, permite una distribución eficiente del aire, dirigiéndolo hacia las piernas, el frente o ambas áreas, según las preferencias del conductor.