Las enfermedades por las que casi siempre se reconoce la pensión por incapacidad
En España, la Seguridad Social es la encargada de proteger a los ciudadanos ante situaciones de vulnerabilidad
No existe una lista oficial de enfermedades por las que se concede la pensión de incapacidad permanente, ya que cada caso se evalúa de manera individualizada por el Equipo de Valoración de Incapacidades (EVI).
Sin embargo, hay ciertas enfermedades que, debido a su gravedad y la afectación que causan en la capacidad laboral, suelen ser reconocidas con mayor frecuencia.
Entre las enfermedades más comunes que pueden dar lugar a una pensión de incapacidad permanente se encuentran:
- Enfermedades respiratorias: como la EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica) y el asma severa...
- Enfermedades cardiovasculares: como la insuficiencia cardíaca y las cardiopatías isquémicas
- Enfermedades neurológicas: como la esclerosis múltiple, el Parkinson y la epilepsia
- Enfermedades mentales: como la depresión mayor, la esquizofrenia y el trastorno bipolar
- Enfermedades musculoesqueléticas: como la artritis reumatoide y la espondilitis anquilosante.
Es importante recordar que la concesión de la pensión depende de la evaluación médica y social de cada caso específico, y no solo del diagnóstico de la enfermedad.
Una vez se cuente con el informe médico, el siguiente paso consiste en solicitar una cita para la valoración médica ante el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS).
Durante esta cita, un equipo médico especializado, dependiente de este organismo, analizará la situación del trabajador y determinará si cumple con los requisitos necesarios para acceder a la baja laboral por incapacidad permanente.
Más noticias: