La Guardia Civil sigue la pista a estos adornos de Navidad, pueden chafarte la fiesta
La Navidad también implica cuidar de la biodiversidad que nos rodea
En todos los hogares de España, cuando llegan las navidades, decoran su casa con el árbol y el pesebre.
Muchas personas se toman esta preparación y decoración de su casa como una tradición y procuran que todo sea lo más realista posible.
Durante algo más de un mes, las casas se llenan de luces y adornos navideños colocados en los árboles.
Entre todas las decoraciones, no se puede olvidar la de poner el Belén. Desde el árbol y el espumillón hasta los belenes, cada detalle cuenta para recrear el espíritu festivo.
Hay un adorno navideño que muchos consideran imprescindible para sus belenes. Sin embargo, conseguirlo puede ser motivo de multa, según ha informado la Guardia Civil.
El musgo, el muérdago y el acebo, no se pueden coger en su hábitat
Hay quien busca algo sencillo, con tan solo un pesebre y las figuras de San José, la Virgen María y el Niño Jesús. Pero también hay quien busca una decoración realista, y apuesta por añadir detalles a esta escena bíblica
La Benemérita ha publicado un vídeo el TikTok en el que ha avisado a los usuarios. Hay un adorno navideño que se encuentra en la naturaleza y cuya recogida en estado natural está prohibida.
Se trata de elementos como el musgo, el muérdago y el acebo, elementos típicos en los Nacimientos y en la decoración navideña en general.
El musgo, por ejemplo, retiene la humedad del suelo, mientras que el acebo y el muérdago sirven de refugio y alimento para muchas especies.
La Guardia Civil avisa en el vídeo que su recogida es una infracción que puede conllevar 9.015,18 euros de multa en los casos más graves. Según la Ley 3/2000, de 7 de enero, de régimen jurídico de la protección de las obtenciones vegetales.
Por ello, la Guardia Civil recomienda alternativas sostenibles, como adquirir estas plantas en floristerías o viveros.
Así, es posible disfrutar de una decoración navideña auténtica y respetuosa con el medio ambiente, demostrando que la magia de la Navidad también implica cuidar de la biodiversidad que nos rodea.
Más noticias: