Ángel Llàcer reaparece tras superar una grave enfermedad que casi le cuesta la vida

Àngel Llàcer ha concedido su primera entrevista cuatro meses después tras superar la grave enfermedad que le ha tenido alejado de la pequeña pantalla.

Fue al programa de TV3, ‘Col-apse’, presentado por Ricard Ustrell, Llàcer, rompió a llorar  al recordar como contrajo la bacteria que estuvo a punto de costarle la vida.

"Me voy a Vietnam de vacaciones y desoigo esas indicaciones de no beber cualquier agua o comer según dónde. Cuando paso a Tailandia, allí me pongo muy mal".

"Una doctora en Bangkok me pone unos antibióticos  y estoy tres días en reposo y  vuelvo a casa", explicó Llàcer. Se desplaza a Madrid y el 13 de abril, lo recuerda como el día que cambió su vida. "El primer síntoma es dolor de barriga, diarreas muy fuertes y fiebre".

"Llego al hospital y me dan el alta. Al día siguiente estuve muy mal, volví y me ingresaron durante 10 días. Salí y yo pensaba que ya estaba curado y la bacteria estaba muerta", contaba.

Volvió a Barcelona, y le dolía la pierna, estaba muy hinchada y los médicos le pusieron bajo vigilancia."La doctora advierte de que deben abrirme la pierna. El viernes me hacen la primera intervención y ven la gravedad de la enfermedad".

Una bacteria que se come el cuerpo

"Es una bacteria que se come el cuerpo. Retiran la parte podrida de la pierna, cierran y todo perfecto.  Sin embargo, le digo a la doctora que todavía tengo la premonición de que me voy a morir", explicó muy afectado.

No podía evitar las lágrimas. Recuerda que dos días después, volvía a pasar por quirófano. Le dijeron que era una operación complicada y se despidió de sus seres queridos.

"Era una operación complicada porque el gemelo estaba curado, pero la bacteria siguió subiendo y si entra en un órgano vital... se acabó. Me dijeron:  'O sales sin pierna o no sales'", revela.

Llàcer sigue luchando en su recuperación. Enseñó sus grandes cicatrices que le han quedado, una clara prueba de lo dura que ha sido la enfermedad.

Ángel ha tenido que aprender a andar de nuevo, y cuenta que pensó que no volvería a hacerlo. "He aprendido a poner un pie detrás de otro, literalmente".

"No puedo saltar ni subir escaleras, solo caminar, y lo hago lentamente. Aprender a caminar  ha sido toda una metáfora", aclaraba.

Ha confesado que necesita ayuda hasta para meterse en la cama. Poco a poco intenta retomar su vida.

En el programa le tenían preparadas algunas sorpresas. Entre ellas, el mensaje de su doctora, le recordaba que tenía que retomar su vida, pero progresivamente.   

Entre bromas, le recordaba que aún tenía varias sesiones de fisioterapia por delante para recuperarse por completo.

En este momento, Llàcer rompió a llorar.