Zinedine Zidane es un hombre de ideas fijas y muy claras; ayer volvió a sorprender con su planteamiento y el equipo patinó en el peor momento posible.
El técnico marsellés analizó, con frialdad, lo sucedido en el 2-2 ante el Celta de Vigo, y sacó una clarísima conclusión: el equipo abusó de los centros al área y lo terminó pagando.
“Dolorido. Hicimos un esfuerzo tremendo, volvemos en el partido, y a cinco minutos del final nos empatan. Nos meten gol a los seis minutos. Se encerraron mucho atrás. No encontramos el hueco, en la primera parte, centramos demasiado y en la segunda parte yo creo que lo estábamos haciendo mucho mejor”, sentenció el míster.
Un problema que tiene que solucionar y que causa un buen quebradero de cabeza en los aficionados. En el propio Bernabéu y en redes sociales el enfado era evidente y la lectura era muy clara: “Solo centramos al área y no tenemos goleador”.
“Son detalles los goles de ellos, pero puede pasar”
Un análisis que también hizo Zidane. Se quedó sin cambios para meter a Luka Jovic como revulsivo y el Real Madrid terminó pagándolo ya que se quedó sin un ariete puro para buscar el 3-2 que le diese la victoria en el tiempo de descuento.
“Jugamos de toda la vida con 4-3-3, no creo que nos haya debilitado. En el primer gol que nos meten no estamos posicionados. Puede pasar y nos va a pasar otra vez. Son detalles que debemos tener mucha concentración. Jugamos contra jugadores que son buenos”, siguió criticando Zinedine Zidane en la sala de prensa del Bernabéu.