La situación a la que nos está llevando la crisis del coronavirus va a ser, cuanto menos, irreparable.
Los países se las están viendo y deseando para poder dar con una solución a todos los frentes que se han abierto después de llegar a paralizar prácticamente toda actividad.
Es el ejemplo de España o Italia.
En el país italiano se han encontrado, además, con el problema sanitario y económico, también con el educacional y es que son muchos los alumnos que a día de hoy no saben si van a poder continuar con sus estudios o no.
La solución de Italia
Lo cierto es que están estudiando hacer un decreto ley para poder regular el fin del año académico.
Esto significa que todos los alumnos tendrán un aprobado y pasarán inmediatamente al próximo curso con la normalidad que el virus permita.
Si algo parece ser cada día más claro es que las aulas no volverán a abrir sus puertas hasta el mes de septiembre.
Desde el Ministerio de Educación italiano señalan que serán los comités educativos los encargados de planificar el nuevo año escolar.
Con toda probabilidad el curso 2020-21 empiece más tarde de lo habitual ya que pretenden que los alumnos que van perdidos en algunas materias se pongan al día para así empezar con buen pie el nuevo curso.
Por lo que a los universitarios se refiere, la cosa se complica algo más y es que parece ser que planean hacer una selectividad oral. Pese a que todavía no se ha confirmado la noticia, la ministra de Educación, Lucia Azzolinia, ha señalado que el examen para acceder a la universidad continuará siendo "serio" aunque diferente.
Todo indica que el curso no podrá reanudarse por lo que ya cuentan con un plan B para quienes este año tenían que hacer la 'maturità', lo que viene siendo nuestra Selectividad.
El examen será oral, se realizará a través de una plataforma online y durará 1 hora.
La solución educativa en Italia
"Era inevitable que fuera así porque es una situación excepcional", comenta el secretario de Estado de Educación, Peppe De Cristofaro.
"Es un gran problema, porque la 'maturità' es el primer examen importante en la vida, tiene una gran densidad cultural y formativa, pero no podíamos hacerlo como se hace normalmente".
Además, ha explicado que "los insuficientes se transformen en suficientes".
"Si un chico suspende y estos meses a distancia no ha mejorado, el profesor no le subirá la nota. Se le admitirá, pero con la nota insuficiente que tenía. Al principio del curso tendrá que hacer unas clases de recuperación de la materia", señalando que el curso del año que viene podría retrasarse más de lo normal.