Morirás de amor al ver cómo responde este can cuando el humano le regaña después de hacer una trastada.
El animal no duda en hacerle pucheros junto a su peluche favorito mientras su dueño le reprocha su mal comportamiento.
Y aunque el humano se muestra muy cabreado y firme en su decisión, el perrete asume sus errores y agacha la cabeza.
Pero, ¿quién se puede resistir a esa carita de arrepentimiento?