Las diferencias entre perros y gatos son infinitas, aunque también tienen muchos puntos en común y pueden llevarse bien si están bien educados.
Una de las diferencias más conocidas y divertidas entre perros y gatos es la forma que tienen de comer.
Mientras los gatos husmean pacientemente los alimentos antes de ingerirlos, los perros no suelen andarse con pequeñeces y devoran lo que les damos.
El vídeo que encontraréis a continuación pone de manifiesto esta diferencia de una manera muy gráfica y cómica.