Te quedarás sorprendido al observar cómo esta gatita se enfrenta a su segundo parto con la mayor fortaleza posible.
Y es que durante su anterior alumbramiento la mascota corrió mucho riesgo hasta el punto de que casi pierde la vida, por lo que en esta segunda ocasión su dueño no se separa ni un segundo de la misma.
Ante las claras señales de que va a dar a luz, el animal se prepara y se posiciona encima de una cajita cubierta de trapos para dar la bienvenida a los pequeños.
Y aunque en un principio el parto se retrasa y complica un poco, finalmente consigue por su propio pie parir a sus dos gatitos.