Al igual que ocurre con los bebés, las primeras veces de las mascotas también se convierten en momentos muy emotivos e importantes en la vida de sus dueños.
En esta ocasión, el protagonista del vídeo es un gato que acude por primera vez a la playa.
Y aunque al principio este lugar no es santo de su devoción e intenta aferrarse a los humanos lo máximo posible para que ni la arena ni el agua del mar le roce, poco a poco la mascota va ganando confianza.
Te quedarás sorprendido al observar lo rápido que el felino se enamora del mar y lo bien que se lo pasa nadando junto a su dueño y usando su espalda como tabla de surf.