Seguramente queremos tanto a nuestros amigos de cuatro patas porque son felices con muy poco y nos proporcionan alegría constantemente.
En el vídeo que os traemos hoy, un perro se prepara para ejecutar un salto desde una gran altura.
Está nervioso, tiembla, pero finalmente da un gran salto y cae en los brazos de su dueño.
Su dueño, eufórico, lo zarandea en el aire; y el perro lo celebra con una sonrisa de lo más enternecedora.