Al igual que en las películas, en la vida real también existen los buenos y los villanos de la historia y en este caso los protagonistas del vídeo se han hecho cargo del papel de los malos, en concreto del Grinch.
Y es que las mascotas no es que sean unas grandes amantes de la Navidad, por lo que cada vez que ven algo referido a esta época del año no dudan en boicotearlo.
De hecho, su última trastada ha consistido en derribar de una sola estacada el árbol de Navidad que su dueño había puesto con tanta ilusión.
Por lo que con esta simple acción ya se les puede bautizar como los Grinch de estas fiestas.