Que los perros tienen un corazón que no les cabe en el pecho es algo más que sabido.
Y es que las mascotas lo demuestran día a día con sus actos cuando ayudan y consuelan tanto a los humanos como a otros compañeros.
En esta ocasión, el can del vídeo se encarga de rescatar a su mejor amigo de una gran inundación que ha asolado la ciudad.
El perrete lo coge con la boca y lo traslada hasta una zona segura para que el animal no se moje ni muera ahogado.