Alucina al ver la destreza que tiene este gatete a la hora de tocar el piano.
Y es que se puede decir que esta es una de sus grandes pasiones, ya que el animal le pone todo el sentimiento del mundo a cada tecla que toca.
¡Incluso se atreve a seguir el ritmo con el cuerpo mientras suena la canción como si se tratara de todo un profesional!
Y a pesar de que el felino lo hace de maravilla, este es un tanto tímido, por lo que cuando descubre que su dueño le está grabando para en seco el recital y se queja maullándole.