Por lo general, el comportamiento de los ciudadanos españoles durante la cuarentena está siendo ejemplar.
Sin embargo, también se ha disparado la picaresca de los españoles.
Personas paseando con bolsas de basura vacías, con carritos de la compra vacíos, con perros de peluche...
Y también hay dueños de perros que aprovechan para pasear un tiempo mucho más largo de lo habitual con sus amigos de cuatro patas.
Una actitud insolidaria que pone en riesgo la expansión del coronavirus.
No más allá de 100 metros del domicilio
El Ayuntamiento de Badalona (Barcelona) ha establecido que los paseos por el perro solo los pueda hacer una persona y que sean cortos, para cubrir las necesidades fisiológicas del animal y no más allá de una distancia de 100 metros del domicilio.
El alcalde, Álex Pastor, toma estas medidas a la vista de que hay ciudadanos que realizan paseos con perros de forma poca segura y con el objetivo de minimizar riesgos.
Sanciones y excepciones
Pastor ha recordado que no son actividades de ocio y que podrá sancionarse a quien contravenga.
La decisión de que solo una persona pueda pasear al perro se establece excepto en familias monoparentales que no puedan dejar a sus hijos solos en casa.