Vacunar solo a los ancianos reduciría a la mitad la mortalidad del Covid19

Se desconoce qué porcentaje de personas debería vacunarse para lograr inmunidad masiva. Según un estudio la inmunidad de grupo no llegará hasta mediados de 2022

27 de Diciembre de 2020
Vacunar solo a los ancianos reduciría a la mitad la mortalidad del Covid19
Vacunar solo a los ancianos reduciría a la mitad la mortalidad del Covid19

Expandir la vacuna a los mayores de 80 años, unas 273.000 personas, ayudaría a reducir la mortalidad en un 50%, pese a representar aproximadamente el 3% de la población. En España, según los datos del INE, las personas mayores de 80 años representan en torno al 6% de la población.

Según los datos, las vacunas podrían seguir el principio 80-20, donde vacunando al 20% más vulnerable se podría reducir la mortalidad en un 80%.

La eficacia del 95% es en condiciones de laboratorio, pero por el momento no sabemos qué porcentaje de éxito tendrá una vez se aplique a la población.

Según explica el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades: "al principio, los suministros de la vacuna contra el COVID-19 serán limitados", a lo que añaden que "para detener una pandemia es necesario utilizar todas las herramientas disponibles", en referencia a que el uso de la mascarilla y la distancia social seguirá siendo necesaria para ayudar a reducir el riesgo de estar expuesto y propagar el virus.

Respecto a la rapidez con que las vacunas de la COVID-19 ayudarán a frenar la pandemia, esta es la respuesta de la Organización Mundial de la Salud:

"El efecto de las vacunas contra la COVID-19 en la pandemia dependerá de varios factores. Algunos de esos factores son: la eficacia de las vacunas; la rapidez con que se autoricen, fabriquen y distribuyan las vacunas; y la manera en que se vacune a las personas". La OMS trabaja para asegurar que toda vacuna aprobada tenga la máxima eficacia posible, de modo que consiga el mayor efecto en la pandemia".

Las vacunas previsiblemente tampoco llegarán a la mayoría de la población antes de finalizar el año que viene. Sin embargo, su efecto en las personas mayores podría tener un significativo impacto. Ayudando a reducir considerablemente la mortalidad y de paso aligerando la carga del sistema sanitario.