Las redes sociales han comenzado a convertirse en un verdadero veneno para jóvenes y adultos de todo el mundo, convirtiéndose en una verdadera adicción.
Algo que Fernanda Rocha Kanner, médico y madre de Brasil, detectó en su hija de 14 años, conocida en las redes como Nina Ríos. Y es que la joven, con más de dos millones de seguidores en Instagram, comenzaba a verse seriamente influenciada por los comentarios que recibía diariamente en sus redes sociales.
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"No creo que sea sano, ni siquiera para un adulto, y mucho menos para un adolescente, basar la autopercepción en comentarios online" explicaba la madre en la televisión local "Ya es bastante difícil descubrir quién eres a los 14 años".
Una situación ante la que esta madre tomó una decisión "radical" pero "necesaria": cerrar las cuentas de su hija en Instagram y en TikTok.
Nina Ríos, aliviada sin redes
"En sus redes, había decenas de clubes de fans, todo muy dulce, pero también dañino para cualquier adolescente en proceso de descubrimiento y búsqueda de la individualidad. No quiero que crezca creyendo que es ese personaje. Nacemos con varios dones que nos hacen únicos, pero cuando copiamos al rebañño se diluyen en el proceso y acabamos siendo uno más del montón" ha explicado la madre en su cuenta de Instagram.
Una decisión que se ha hecho viral en las redes sociales, donde ha suscitado miles de comentarios positivos... y a la vez, miles de críticas por su intervención: "Me pasé la semana leyendo a desconocidos decirme que era narcisista, egoista [...] Lo leí mientras ella dormía tranquila y felizmente pegada a mi lado, impermeable a los venenos de Internet".
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Por su parte, la joven ha admitido haberse enfadado en gran medida tras conocer las acciones de su madre en sus cuentas de redes sociales, pero que, ahora, no lo lamenta. Es más, actualmente no piensa en volver a las redes, y duda de si lo hará en un futuro: "yo decidiré" ha sentenciado.