Un niño de seis años ha muerto después de que sus padres lo hayan violado con un palo para castigarlo. El retoño se comió un trozo de pastel sin el permiso de sus padres y después del brutal castigo, cogió una infección que le causo la muerte.
Todo ha ocurrido en Arkansas, Estados Unidos. El padre del niño, Mauricio Torres, de 50 años, fue supuestamente quien violó al chico con el palo. Pero no era la primera vez que torturaban al niño. (Se cura el coronavirus y muere a los cinco días de salir del hospital)
Una de muchas torturas
Tanto el padre como la madre torturaban el niño de manera diaria. Una vez le arrancaron los dientes con unos alicates. El menor estaba sufriendo un auténtico infierno en su casa.
La hermana del fallecido testificó en juicio en contra de los padres. Asegura que le torturaban sin parar y que en ocasiones le obligaban a participar y a pegarle. Una de las veces frotaron con legía al crio.
Le introdujeron un palo por el ano
En otra ocasión, le obligaron a dormir entre las basuras. El principio del fin del chico llegaría en un camping. El chaval se comió un trozo de pastel sin pedir permiso, por lo que el padre le introdujo un palo en el ano y le obligó a hacer sentadillas.
Más tarde, la madre observando, le empujo, por lo que propició que el palo se introdujera más en el chico. El chico sufrió un choque séptico, causándole la muerte por diversas infecciones. (¡De película! Tres jugadoras de voleybol dan caza e interceptan a un atracador)
El padre se cree inocente
El colmo de toda la historia es que el padre se ha declarado inocente. Al contrario que la madre, quien confesó los crímenes y pasará el resto de su vida en prisión (cadena perpetua), el padre intenta escurrir el bulto.
Acusado de asesinato y maltrato, en primer lugar se le sentenció a muerte, pero como los hechos no ocurrieron en Arkansas, el juicio se ha alargado.