El pasado domingo ABC (no lo busquen en la empresa del 'Conde de "Cobró"' ni de otros chupatintas comprados por el Régimen), abrió su portada con un titular revelador: “Las comarcas más secesionistas lideran el declive económico de Cataluña”.Estas son las conclusiones del estudio basado en datos del Anuario Ecónomico Comarcal del BBVA y de I'DESCAT, sobre las 42 comarcas catalanas.
Desde 2019 Madrid ya aporta más al PIB nacional que Cataluña (19,3% vs 19%).
A más voto secesionista, peor comportamiento económico y menor aportación a la economía catalana.
Las 8 comarcas catalanas con voto secesionista inferior al 50% crecieron en 2019 con una media del 1,5% del Valor Agregado Bruto (VAB, equivalente al PIB menos los consumos e impuestos indirectos).
Entre las comarcas con menos del 50% de voto independentista ninguna tuvo crecimiento negativo.
Las 17 comarcas que superan el 70% de voto independentista el crecimiento medio fue del 0,8%, la mitad del de las menos independentistas.
Las 8 comarcas con decrecimiento tienen un voto independentista superior al 50%.
Las 10 comarcas con más voto separatista crecen por debajo de la media catalana, salvo Pla de l’Estany.
Las 5 comarcas más separatistas suman 48.448 cotizantes a la Seguridad Social, por 865.750 las 5 menos secesionistas.
¿Y eso que quiere decir? Que Cataluña solo aguanta gracias al tirón de Barcelona, dice el catedrático de Economía Aplicada de la UAB, Françesc Granell.
¿Conclusión? Las comarcas nacionalistas que reciben el 21% de las subvenciones y solo aportan el 4% del PIB catalán, frenan el crecimiento de la dinámica a Barcelona.
Sería hora que empezaran a mirar los números.