Cientos de personas que residen en Corea del Norte intentan huir del país cada año. Ha Jin-woo, un desertor que logró huir en 2014, ha contado a la BBC los riesgos de intentar escapar del régimen de Kim Jong-un.
En los últimos años, desde que Kim Jong-un llegó al poder, el número de desertores ha disminuido considerablemente debido, sobre todo, a las drásticas medidas que ha tomado el líder norcoreano.
Ha Jin-woo solía ayudar a escapar a otras personas residentes en Corea del Norte. Ahora, ha desvelado los entresijos y peligros de marcharse del país y dar la espalda a Kim Jong-un.
"En aquellos tiempos podías simplemente sobornar a la patrulla fronteriza local y decirles que necesitabas ir al mercado de China", ha explicado Ha Jin-woo sobre las deserciones.
Sin embargo, Kim Jong-un notó que había muchos desertores en las televisiones de Corea del Sur y tomó medidas. "El poder de la patrulla fronteriza de Corea ha aumentado mucho. Ahora pueden disparar a alguien que intente cruzar sin rendir cuentas por ello".
Además, el líder del régimen norcoreano ha instalado una cerca eléctrica de alambre se ha instalado en la zona fronteriza para evitar que los ciudadanos de Corea del Norte se marchen del país de forma descontrolada.
Ahora, la forma de escapar es atravesando ríos, lo que supone un riesgo elevado. "A lo largo de un acantilado no se puede poner una cerca", ha explicado el desertor Ha Jin-woo.
Al llegar a China, los desertores tienen otra complicada misión. Deben escapar de las autoridades del país ya que, si les pillan, les enviarán de nuevo a Corea del Norte y serán ejecutados. "Serían considerados espías. Una palabra equivocada puede provocar la muerte".
La salida de China, clave
"En ocasiones, al salir de China, la policía revisa nuestras identificaciones. Cuando me miraron a mi estaba muy asustado", ha señalado Ha Jin-woo, que recurrió al río Mekong durante su escapada para llegar a Tailandia.
A la hora de escapar por el río, se utilizan barcas pequeñas en el que el espacio es mínimo porque van abarrotadas. Hay un elevado riesgo de que se hunda pero muchos de ellos están dispuestos a todo con tal de salir de Corea del Norte.