Bankia y Caixabank publicaban su fusión en una única entidad, un auténtico revuelo dentro del sector financiero español, ya que esta unión entre ambas entidades provoca que nazca un nuevo gigante económico español, que podría superar al banco Santander.
Una unión que, además, ha gustado mucho dentro de la Bolsa, que ha experimentado fuertes subidas en las acciones de ambas entidades, a pesar de que los consejos de administración de ambas entidades aún se encuentran en los inicios de las negociaciones.
Algo que ha hecho que los principales motores económicos del país, Madrid, Barcelona y Valencia, se centren ahora en la carrera por conquistar a la sede de la nueva entidad.
Una carrera que estaría ganando Valencia, ya que tanto Bankia como Caixabank tienen actualmente sus domicilios sociales en la ciudad de Ximo Puig, quien no ha dudado en ponerse en contacto con los responsables de ambas entidades nada más conocer la noticia.
"Sería un hito muy positivo para la Comunitat Valenciana, dentro del respeto absoluto a las decisiones que tomen dos entidades privadas" han asegurado fuentes del Gobierno valenciano a Europa Press.
Así también lo aseguran fuentes de los sindicatos de UGT y CCOO, que apoyan la operación de fusión de ambas entidades, siempre y cuando Caixabank y Bankia procuren que se preserve el empleo de los actuales trabajadores, y que los despidos que se produzcan se hagan de manera consensuada y negociada.
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Madrid y Barcelona también apuestan por conquistar a los bancos
Sin embargo, a la Comunidad Valenciana le han salido dos duros competidores a la hora de albergar la sede del nuevo gigante financiero español.
Por un lado, la Comunidad de Madrid se erige como el motor económico predilecto del sector español, uniendo su capacidad financiera al hecho de ser el centro económico y social del país, así como la capital española, una condición muy alentadora para el mercado extranjero.
Barcelona, por su parte, también apuesta por esta fusión, en su caso, intentando recuperar a Caixabank, que fue una de las miles de empresas que se 'fugaron' de Cataluña tras el procés independentista.
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"Evidentemente, lo mejor sería que estuviera en Barcelona, en Cataluña" ha asegurado Pere Aragonès, vicepresidente del Govern y conseller de Economía y Hacienda de Cataluña, que ha declarado que "seguirá con mucha atención" la negociación entre ambas entidades.