Tracy Edwards posiblemente sea el hombre más afortunado del mundo, pero también el más atormentado. Situaciones como las que le tocó vivir como único superviviente de la matanza de Jeffrey Dahmer, no son poca cosa.
Son momentos que se viven una sola vez en la vida, porque es muy probable que a la próxima ya no te dé tiempo a contarlo porque ya no estás aquí. Seguro que eso es lo que debió pensar el hombre cuando salió de la vivienda del asesino en serie a duras penas. Podría haber sido una víctima más en la brutal operación sanguinaria que estaba causando Jeffrey en Milwaukee.
Pero la vida quiso darle una segunda oportunidad. A duras penas logró salir, rápido y huyendo del apartamento. Le plantó cara y después de deshacerse de él con varios forcejeos, golpes y descubrir todos los candados que tenía en la puerta, consiguió escapar. Según la información publicada por el medio 'Diario del Crimen', fue una misión imposible, sin embargo, el hombre de 32 años logró sobrevivir.
Un año más tarde, fue una pieza clave en el juicio del criminal. Para desgracia de Tracy, tuvo que remover aquel oscuro momento de su vida, no obstante, solo fue para cerrar para siempre una de las peores matanzas que se recuerdan.
El único superviviente
Como es de esperar, aquello no fue nada fácil de olvidar. La única víctima superviviente se hundió moralmente. Le sobrepasaron todos los acontecimientos una y otra vez, y es que al ver la muerte tan de cerca, poca cosa se puede hacer. Tracy lejos de reconducir su vida, tratarse o cuidarse a sí mismo y celebrar que estaba vivo, cayó en una profunda depresión.
Los conflictos psicológicos llenaron su cabeza y, finalmente, cayó en las drogas y en el consumo de alcohol. Fue dependiente de estas sustancias las cuales eran sus vicios día sí y día también.
Las víctimas de Jeffrey Dahmer eran sobre todo chicos homosexuales de raza negra, provocando a la vez un crimen homófobo. El asesino solía actuar en barrios marginales y la pequeña ciudad donde residía no tenía mucho más atractivo.
Para aquellos jóvenes de su edad el mejor plan que podían hacer era emborracharse. De ahí que muchos cayeran en las trampas de Dahmer. El estrés postraumático de Edwards seguía creciendo y parecía que nadie había sido capaz de pararlo. Esto dio lugar a que la víctima no se distanciara de los conflictos con otra gente, por lo que se empezó a perder su pista.
En la indigencia y delinquiendo
Muchos rumores decían que había caído en la delincuencia total y era difícil encontrarle. Viviendo en la indigencia, se le recuerdan varios arrestos de la misma policía y hace ya 10 años, lo acusaron de asesinato de un hombre. La identidad de este era considerada como un vagabundo, algo que también acabó viviendo el propio Tracy Edwards debido a su falta de recursos.
De esta acusación acabó saliendo culpable y, además, fue sentenciado a prisión con una cadena de poco más de un año, más dos años de supervisión prolongada después de participar en una discusión que acabó con la trágica muerte de otro vagabundo.
Ahora mismo, aquel joven que salió con vida tendría 63 años, sin embargo, no se sabe nada más de él. Es un verdadero misterio.