La disparidad de criterios entre ERC y JxCat por el tema de la investidura de Pedro Sánchez es total.
Mientras Puigdemont y Torra no quieren negociación alguna con el PSOE, sino imponer su unilateralidad, ERC sí se presta a negociar.
Además, Quim Torra podría tener que hacer frente a su inhabilitación por desobediencia, lo que conllevaría que Pere Aragonès tomase el mando de la Generalitat.
Ante esta situación, el peor presidente de la historia de la Generalitat medita provocar una crisis de Govern para desplazar a Aragonès de la vicepresidencia y que no herede su puesto.
Puigdemont, candidato
Una crisis que cuenta con la aprobación de Carles Puigdemont, pues conllevaría la celebración de elecciones y el expresidente fugado se presentaría como candidato.
Fuentes cercanas a JxCat, según informa El Confidencial, aseguran que el plan de Torra consiste en mantener a Aragonès como consejero de Economía y hacer que Jordi Puigneró pase a ser consejero de Presidencia y adopte las funciones de la vicepresidencia.
Ante esta provocación, ERC podría aceptar la modificación del Ejecutivo catalán o romper con la Generalitat.
Y es que de concretarse el plan de Torra, se rompería el pacto de legislatura entre JxCat y ERC, hecho que obligaría a celebrar elecciones de manera inminente.