El coronavirus de Wuhan llegaba a España a principios de año, extendiéndose rápidamente y provocando que el Gobierno de España tomara la decisión de imponer el estado de alarma de manera urgente.
Un estado de alarma que ha durado tres meses, y que ha confinado a la grna mayoría de los españoles en sus casas, y ha centralizado los poderes sobre el Ejecutivo socialista.
Durante este periodo, Quim Torra, president de la Generalitat, ha sido una de las voces más críticas con Pedro Sánchez y su gobierno, insistiendo en la necesidad de que el Ejecutivo central devolviera el poder a las autonomías. Sobre todo, a la catalana.
Críticas de Torra que fueron elevadas por la consejera de Salud catalana, Alba Vergés, quien llegó a afirmar que en una Cataluña independiente, los casos de fallecidos por coronavirus habrían sido muchos menos que los que se han tenido que lamentar, siendo Cataluña la comunidad autónoma más afectada por la pandemia, registrando el mayor número de fallecidos por millón de habitantes.
Ahora, con el fin de la desescalada, y la devolución de las competencias a los gobiernos regionales, la Generalitat de Torra es la responsable de la salud de los ciudadanos... y el resultado está siendo nefasto: rebrotes y falta de responsabilidad política ante los mismos.
"No nos preocupan"
En concreto, esta semana han incrementado de manera alarmante los casos de coronavirus en la región sanitaria de Lleida, considerando muchos que la situación está completamente descontrolada a día de hoy.
Algo a lo que ha quitado importancia la consejera de Sanidad durante una intervención ante los medios, este viernes por la tarde, desde el Hospital Arnau de Vilanova.
"El porcentaje de positivos son muchos en Lleida" ha reconocido Vergés "respecto a las pruebas, también hemos visto una tendencia al alza, esto nos hace pensar que la epidemia es de crecimiento".
A pesar de la gravedad de sus palabras, la Generalitat de Cataluña no ha tomado medidas de confinamiento en la región sanitaria, y Vergés ha afirmado que "los brotes en sí no nos preocupan". (¿Qué se llevan entre manos Manuel Valls y Ciudadanos?)
"Rebrotes tenemos y tendremos en muchos lugares" ha defendido la de Salud "un brote pueden ser tres casos contados. Si tengo 40 brotes de familias de 40 miembros identificados aislados, no me preocupa. Tres casos aislados, que no tengo vínculo pero no tengo una traza del caso índice, es aquí cuando podemos decir que el virus corre de manera diferente".
Una demostración de la 'gestión' del coronavirus que podremos esperar de Torra y los suyos ante los casos de rebrote, que se espera que aumenten a medida que se acerque el otoño.