El enorme dispositivo de seguridad de la Policía Nacional desplegado para acoger el duelo de alto riesgo entre River Plate y Boca Juniors en el Santiago Bernabéu fue todo un éxito.
La final de la Copa Libertadores se desarrolló en Madrid sin incidentes, aunque la Policía fue ‘víctima’ del lazismo independentista.
En la entrada al Santiago Bernabéu, agentes de policía hicieron tirar algunas banderas amarillas a los aficionados de Boca Juniors.
El amarillo, del que los indepes se han apoderado y con el que han ensuciado toda Cataluña, es también el color que representa al club xeneize.
La Policía, ante la duda, no permitió la entrada de banderas amarillas al Bernabéu
La tabarra del amarillo y los golpistas presos ha llevado a la policía a estos extremos para no ver las gradas del Bernabéu teñidas de amarillo.
En la final de Copa del Rey que enfrentó a Barça y Sevilla en el Wanda Metropolitano el color amarillo también fue vetado.
Un policía indica a un seguidor de Boca que debe tirar la bandera amarilla: