La fusion de CaixaBank con Bankia, sumada a los Expedientes de Regulación y Empleo del BBVA y del Santander enviarán a las listas del paro a unos 15.000 empleados en los próximos meses.
El BBVA ya ha anunciado la puesta en marcha de un plan de ajuste que puede suponer la salida de la compañía de 3.000 empleados. Por su parte, la fusión de CaixaBank con Bankia ha puesto en marcha un ERE para ajustar la plantilla que afectará a unos 8.000 trabajadores. Por su parte, el Santander reducira su plantilla en 3.572 personas.
También se espera la salida de 1.500 personas de la fusionada Unicaja con Liberbank, así como 750 voluntarios de Ibercaja. Estos 15.000 despidos se suman a los casi 100.000 empleos del sector que se han perdido desde 2008.
Casi 100.000 despidos desde 2008
UGT contabiliza 98.499 empleos destruidos desde 2008 en el sector financiero, lo que viene a ser un 36,43% del total de la plantilla. UGT denuncia esta situación de "destrucción masiva de empleo" recordando que se está jugando con la vida de personas y de sus familias, que deben añadir el drama laboral a la situación de crisis general que se vive por la pandemia del Covid-19.
Y censura a los bancos por adoptar este tipo de soluciones excusándose en la crisis financiera y ahora en la digitalización.
El Santander ha acordado una reducción de plantilla para año de 3.572 personas, pero ha reubicado en Santander Personal a 400 y otros 1.100 en empresas del grupo. El tema afecta a 5.072 personas. La filial británica también ha anunciado el despido de 600 personas.
El sindicato apunta que entre 2021 y 2022, las salidas de empleo pueden acercarse a las 20.000 personas en el sector bancario.
Ibercaja tiene firmadas 750 salidas voluntarias entre empleados que ahora tienen entre 57 y 63 años. El Sabadell ya pactó en 2020 la salida de 1.817 personas, de las que aún faltan unos 1.000 por dejar su empleo. El banco cuenta con un ahorro de 115 millones en costes anuales.