Desde su reaparición pública a través de las docuseries, Rocío Carrasco ha mantenido de forma constante un discurso, más allá de su enfrentamiento con David Flores: el amor que siente por sus hijos, Rocío y David Flores, y lo mucho que los echa de menos.
Una confesión de la hija de la más grande que ha sido constantemente defendida desde los platós de Mediaset por los grandes 'aliados' de Rociíto en esta contienda, como Carlota Corredera o Terelu Campos quien, además, ha demostrado ser una de las amigas más fieles de Rocío Carrasco desde hace años.
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Sin embargo, Raquel Bollo ha conseguido algo casi imposible de creer en el plató de Sálvame: y es conseguir que Terelu acabe 'traicionando' a su gran amiga, dejando en evidencia que, a pesar de sus confesiones, no es tan buena madre como asegura querer ser para sus hijos.
La verdad de Rocío, al descubierto
"Las madres protegemos a los hijos. Y aunque la mierda venga hacia mí... pero no a mis hijos. No los voy a exponer para salvar mi culo" aseguraba Bollo ante las cámaras, contando inmediatamente con el apoyo de Terelu.
"Por supuesto" confesaba la presentadora "Estoy totalmente de acuerdo. Lo he dicho yo... cómo no te voy a entender. Que la mierda para nosotras siempre" insistía Terelu en pleno plató.
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Palabras que, a pesar de demostrar el gran amor de la presentadora por su hija, también demuestran las mentiras que Rocío Carrasco ha intentado mantener ante las cámaras los últimos meses en relación a sus hijos.
Y es que la hija de la más grande no ha dudado en utilizar a sus hijos en televisión para cargar contra su ex marido, a pesar de las lágrimas de Rocío Flores en plató, situándolos en el centro del conflicto con Antonio David Flores y en el punto de mira mediático, provocándoles nuevas heridas, a pesar de asegurar quererles y querer protegerles desde que nacieron.