Si no lo hacen peor es porque no se entrenan. El Barça es un auténtico desastre. El presidente Josep Maria Bartomeu ha puesto los destinos deportivos del club en manos de un aficionado como Eric Abidal, con experiencia cero en este tema y los resultados nefastos no han tardado en llegar.
La planificación (?) de Abidal ha dejado a una entidad con mil millones de presupuesto con tres delanteros para cubrir tres plazas y tres centrales para dos puestos. Ni el más modesto de los equipos de Tercera División va tan justo de jugadores.
La última barrabasada de Abidal se produjo con la venta de los prometedores canteranos Carles Pérez y Abel Ruíz a la Roma y Sporting de Braga respectivamente. Y ya sin ellos, el Barça se ha puesto a la caza y captura de un delantero, porque sólo le quedan Messi, Griezmann y Ansu Fati.
Por eso ha llegado Braithwaite (18 millones), para jugar 14 partidos de La Liga (y veremos cuántos juega), porque el Barça ya no está en la Copa y en la Champions League no puede inscribirle.
Cada partido de Braithwaite costará 1, 28 millones... si los juega todos, que está por ver
Es decir, que en el caso de que juegue todos los partidos, que ya es mucho suponer, cada encuentro de Braithwaite le costará al Barça 1,28 millones de euros. Y es que nadie duda que dentro de cuatro meses Braithwaite ya no estará en el Barça con el regreso de Suárez y Dembélé y los pretendidos fichajes de Neymar y Lautaro... o los que vengan en su lugar.
Mientras tanto Carles Pérez ha debutado como titular en la Roma jugando la Europa League marcando un gol de los suyos, de los que nunca más logrará para el Barça. Su gol le dio la victoria por 1-0 a la Roma ante el Gante.
Abel Ruíz tuvo menos suerte y su equipo perdió ante el Glasgow Rangers por 3-2, pero anotó el segundo gol de su equipo en el partido de su estreno.