El consejero de Torra de Acción Exterior y Relaciones Institucionales, Alfred Bosch, ha pedido perdón a los pueblos indígenas de México por la colonización española en un patético intento por internacionalizar el conflicto catalán.
“Que tengamos muy claro que la conquista y la colonización introdujo una discriminación y una marginación inaceptable”, ha opinado Bosch delante de los representantes del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas (INPI) de México.
“La autodeterminación de los pueblos es un elemento fundamental de la democracia en el mundo que se ha de respetar”, ha apuntado Vicente Vázquez, director de asuntos internacionales de INPI, solidarizándose con los separatistas catalanes.
Consejo a Sánchez
Alfred Bosch se ha atrevido a animar a Pedro Sánchez a asumir las responsabilidades históricas con México: “Una relación más sana entre pueblos, de igual a igual, sin síntomas de dominación, de discriminación o de supremacismo”.
¿Con qué legitimidad habla Bosch de supremacismo cuando su jefe, Quim Torra, representa el supremacismo más rancio?
Que los separatistas tengan que hablar de la colonización española de México de hace cinco siglos demuestra una vez más la falta de argumentos de los que quieren romper España.