En el mundo de los famosos, las operaciones estéticas están a la orden del día y cada vez son más los que deciden someterse a algún pequeño retoque para mejorar su imagen. El último en hacerlo habría sido, según apuntan los rumores de los últimos días, el torero Jesulín de Ubrique. El padre de la hija de Belén Esteban se dejó ver en el Salón Internacional del Caballo durante la celebración de su 30º aniversario y asombró por su aspecto.
La imagen que dejó Jesulín durante dicho evento fue la de una persona bastante diferente de la que estamos acostumbrados a ver. Hay quien lo achaca a que ha ganado algo de peso, lo que ha hecho que sus facciones estén más rellenas. Sin embargo, también hay quien asegura que ha pasado por 'chapa y pintura' para eliminar sus características ojeras y rellenarse los pómulos.
Se trata de un tema que perfectamente podría dar que hablar en Sálvame, pero del que Belén Esteban no quiere decir ni una palabra. Seguro que, al igual que le molestó que su ex pareja pagara el aumento de pecho de Julia Janeiro, la mayor de sus hijos con María José Campanario, también le molestaría saber que se está haciendo retoques estéticos mientras que se negó a pagar la mitad de los estudios de su hija Andrea en Londres.
Jesulín ni confirma ni desmiente los rumores sobre su presunto paso por la clínica estética, pero lo cierto es que su aspecto es muy distinto del de los últimos años. Probablemente Belén, que le conoce muy bien, con solo echarle una mirada puede saber si verdaderamente ha cambiado algo en la cara del padre de su hija o si simplemente tiene unos kilos más.
Miguel Marcos también fue juzgado por su aspecto
Belén Esteban se enfadó muchísimo cuando hace unos días las redes se llenaron de mofas por el aspecto de Miguel Marcos en su fiesta de cumpleaños. El peso del técnico sanitario provocó que muchos hicieran chascarrillos sobre las patatas fritas de la colaboradora, o también sobre sus gazpachos y salmorejos. La de Paracuellos ha evitado hablar de este asunto por todos los medios.
Del mismo modo, tampoco quiere hablar de Jesulín y mucho menos para poner en cuestión si se ha hecho este retoque o aquel: la 'princesa del pueblo' prefiere mantenerse al margen de todo lo que tenga que ver con el torero.
Por este motivo, es un tema que ha vetado en Sálvame y que pretende evitar si en algún momento se acaba colando en la escaleta durante los próximos días. Los únicos que deben preocuparse sobre el nuevo aspecto de Jesulín son él mismo y su mujer, María José Campanario. A Belén Esteban ni le va ni le viene lo que el torero haya hecho con su cara.
Julia Janeiro se queda sola con las preocupaciones que la persiguen
Además, ella tampoco sería la más indicada para criticar el hecho de que Jesulín haya decidido hacerse algún retoque estético, dado que a lo largo de su vida se ha sometido a múltiples cambios en diferentes zonas de su cuerpo. Si nos centramos exclusivamente en la cara, la de Belén poco o nada tiene que ver actualmente con la que tenía cuando se dio a conocer hace 20 años. Y no solo por el paso del tiempo...