Carles Puigdemont se encuentra huido de la Justicia española desde 2017,momento en el que, tras formar parte del desafío independentista al Estado, el ex president decidió marcharse de España antes de ser juzgado, encontrando su 'refugio' legal en Waterloo.
Un refugio en el que goza de cierta libertad gracias a su posición como eurodiputado electo del Parlamento europeo, así como del amparo de la Justicia belga, que ha decidido desestimar las peticiones del juez Llarena.
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Sin embargo, esa libertad del ex president se ha visto muy reducida ante la retirada de la inmunidad europarlamentaria de Puigdemont por parte de la Justicia europea, lo que hace que el fugado pueda ser detenido y juzgado.
Algo que ha cercado aún más al ex president de JxCat, que ha decidido arriesgarse lo mismo ante el riesgo de ser detenido y extraditado a España... haciendo que Puigdemont sea el gran ausente en la inauguración de los nuevos cursos de la Universitat Catalana d'Estiu (UCE).
Sin noticias de Puigdemont
Todo estaba preparado en la UCEpara comenzar su 53ª edición, con multitud de actos y actividades que tendrán lugar entre el 16 y el 22 de agosto en la localidad norteña de Prada (Conflent, Francia).
Bajo el lema de este año, 'Hacer de los Países Catalanes una nación normal', los seminarios de la UCE contarán con la participación de algunos de los independentistas catalanes más radicales, como Laura Borràs, Quim Torra o Laura Vilagrà.
Presencias que se esperaba que fueran completadas por el propio Carles Puigdemont, siempre dispuesto a darse un baño de masas bajo la protección de la frontera francesa, que limita las actuaciones de las autoridades españolas.
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Sin embargo, este año ha sido muy distinto: y es que tres agentes de la Gendarmería francesa se presentaban en el recinto de la UCE para preguntar sobre el paradero de Puigdemont, sobre si se encontraba, o pensaba acudir, a las premisas de la UCE, así como su posible alojamiento en el albergue Pau Casals de Prada.
A pesar de ser el tercer año en el que la Gendarmería francesa acude al lugar en busca del expresident, es el primer año en el que Puigdemont no hará acto de presencia, demostrando que su preocupación por mantenerse al margen de la Justicia es mayor que la de conseguir la independencia de Cataluña.