Se cumplen 20 años del asesinato de Ernest Lluch

Lluch intentó mantener su equidistancia entre el nacionalismo español y el vasco, ya que condenaba "las violencias del pasado y del presente"

21 de Noviembre de 2020
Se cumplen 20 años del asesinato de Ernest Lluch
Se cumplen 20 años del asesinato de Ernest Lluch

21 de noviembre del año 2000. El exministro socialista Ernest Lluch llega a su casa de Barcelona por la noche cuando dos terroristas de ETA le disparan en el aparcamiento de su domicilio. Lluch recibe dos disparos, uno de ellos en el cuello, y muere en el acto a la edad de 63 años. Pasan casi dos horas hasta que un vecino suyo encuentra el cuerpo tendido entre dos coches.

Tras los disparos, los asesinos huyen en un coche con las matrículas dobladas, un procedimiento habitual en ETA, y lo hacen explosionar, sin causar ningún herido, en un descampado a unos 500 metros del domicilio de Lluch y a pocos metros de la residencia del que por entonces era presidente del PP en Cataluña, Alberto Fernández Díaz.

Dos meses después, el 11 de enero de 2001, la Guardia Urbana detiene en la Ciudad Condal a dos integrantes del Comando Barcelona por su presunta relación con el atentado: José Ignacio Cruchaga y Liarni Armendaritz. En julio de 2002, la Audiencia Nacional condena a cada uno de ellos y también a Fernando García Jodrá, a 33 años de prisión como responsables del atentado. El tribunal explica que fue Cruchaga, acompañado de García Jodrá, quien realizó los dos disparos contra el exministro mientras Armendaritz vigilaba en las inmediaciones.

Durante el juicio, García Jodrá protagonizó uno de los momentos más tensos ya que llegó a justificar el asesinato al señalar que Lluch era "un ministro de los GAL", algo que provocó que fuera expulsado por el presidente de la sala mientras alzaba el puño y gritaba "Gora ETA y visca la terra".

La trayectoria de Lluch

Ernest Lluch nació en Vilassar de Mar (Barcelona), estaba casado, tenía tres hijas y era catedrático de Historia Económica de la Universitat de Barcelona. Durante el franquismo fue profesor ayudante del economista español Fabián Estapé en la Universidad de Barcelona, hasta que en 1966 fue expulsado junto a 69 profesores más por apoyar al Sindicat Democràtic d'Estudiants. Lluch fue detenido diversas veces por su oposición a la dictadura de Franco. En 1977, ya en democracia, fue elegido diputado al Congreso del Partit dels Socialistes de Catalunya por Girona, y fue reelegido en 1979. Un año después, en 1980 fue portavoz del grupo parlamentario del PSC en Madrid.

Con la llegada de Felipe González a la presidencia del Gobierno en 1892, Lluch se convirtió en ministro de Sanidad del primer ejecutivo socialista desde la Transición y destacó por ser el autor del primer Plan Nacional contra la Droga y presentar la Ley General de Sanidad, que en palabras de la exministra Ángeles Amador, "transformó la Sanidad en España". Dejó de ser ministro en 1986 y años después fue nombrado el primer rector catalán de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo.

Lluch, sobre ETA y los nacionalismos


Lluch se proclamó, en artículos publicados en diferentes medios, "equidistante" entre "el nacionalismo español y el vasco" ya que condenaba "las violencias presentes y las pasadas": "Equidistante, y por tanto adversario, cuando no enemigo, de ambos, porque la muerte y la violencia nunca se justifican". Lluch explicaba así sus postura sobre los nacionalismos y la banda terrorista ETA: "Aunque uno esté alejado del nacionalismo español y por ello recibe sistemáticamente ataques, está mucho más alejado de ETA. De esta manera de ver las cosas arrancó para defender el diálogo con el nacionalismo vasco no violento. No cejaré hasta que el nacionalismo democrático vasco entre a formar parte del bloque constitucional a través de la fórmula de los derechos históricos o de cualquier otro tipo de negociación".

Su célebre discurso en San Sebastián

En 1999, un año antes de ser asesinado y durante la primera tregua de ETA, Ernest Lluch participó en un acto de campaña en la plaza de la Constitución de San Sebastián para apoyar al candidato socialista a la alcaldía Odón Elorza. Allí, miembros de la izquierda abertzale trataron de boicotear el mitin a lo que él respondió: "Qué alegría llenar esta plaza y ver que los que ahora gritan antes mataban y ahora no matan. No saben que ha llegado la libertad y la democracia a este país, no se enteran. Gritad, porque mientras gritéis no mataréis".