Los independentistas radicales de Barcelona llevan más de 100 días cortando, día sí, día también, la Meridiana de Barcelona, en protesta a la sentencia condenatoria a los organizadores del procès.
Estos cortes dificultan enormemente la correcta circulación de los habitantes de la Ciudad Condal por la zona, ya que muchos se ven afectados por los cortes separatistas a la hora de volver a sus hogares, mientras el Ayuntamiento y la Policía se mantienen inmóviles.
Pero esta situación ha llegado al hartazgo, y Sociedad Civil Catalana anunció hace unos días que tomarían medidas sobre esta cuestión.
"Esto ya es el colmo. En las próximas horas daremos una respuesta clara y contundente que no va a pasar desapercibida" afirmaba la SCC; y así lo confirmaban hoy a través de una rueda de prensa.
A los independentistas de la Meridiana se les acaba el esquí
"Hasta que los trabajadores no puedan volver tranquilamente a casa después de largas jornadas de trabajo, los independentistas tampoco podrán ir a esquiar con tranquilidad los fines de semana" ha amenazado el presidente de la SCC, Fernando Sánchez, en la rueda de prensa, acompañado por su vicepresidente, Álex Ramos, la vocal de la junta directiva, Sonia Reina, y el responsable territorial de Barcelona, Miguel Candel.
Este es el plan de Societat, que consistirá en "cortar los Túneles de Vallvidrera, los viernes, hasta que cesen los cortes en la Meridiana". Así pues, y según ha afirmado Sánchez, le dan 'de su propia medicina', poniendo delante del "espejo" a los radicales que cortan las calles, aunque ha querido señalar que esta acción no es un "gesto político"
En concreto, el dirigente de SCC ha afirmado que los cortes que se produzcan se concentrarán en el último semáforo que hay en Vía Augusta, antes de la entrada a los túneles, a la altura de la calle Hort de la Vila. (Ya sabemos cuál será el trabajo de Junqueras fuera de la cárcel: ¡¡Adoctrinar!!)
Además, la SCC ha afirmado que se pondrán en contacto con el Ayuntamiento de Barcelona para obtener los permisos necesarios para realizar esta "contraprotesta" a los independentistas, ya que entienden que el corte de una de las calles principales de Barcelona es totalmente antidemocrático.