‘Savia’ y ‘sabia’ son palabras homófonas (suenan igual, pero se escriben diferente y su significado es distinto).
A continuación os explicamos cuando debe usarse cada una.
¿Cuándo se usa sabia?
Sabia es un adjetivo femenino que se aplica a una persona e indica que posee sabiduría, que tiene amplios conocimientos en algún tema, disciplina u oficio, o que es prudente y juiciosa.
Sabia también se puede referir a una cosa que instruye o contiene sabiduría.
Ejemplos:
Los años hicieron de la abuela Olga una persona muy sabia.
La maestra, sabia en asuntos de política, prefirió suspender la clase.
Dice una sabia consejera: “líbrame de las aguas mansas, que de las bravas me libro yo”
¿Cuándo se usa savia?
Savia es un sustantivo femenino que hace referencia al fluido o líquido que circula por los vasos de ciertas plantas.
Savia también se utiliza con el significado de energía o cosa que da aliento.
Ejemplos:
Si a un árbol le quitan la savia será madera muerta.
Eres la savia de mis días.
¿Cuándo se usa sabía?
Sabía es el verbo saber conjugado en primera o tercera persona del singular del pretérito imperfecto en modo indicativo.
Sabía significa conocer o tener noticia de algo, tener la habilidad para desempeñarse en alguna actividad.
Sabía también quiere decir que un alimento o bebida tiene sabor.
Ejemplo:
Yo no sabía que Juan venía a esta fiesta.
La comida de la abuela sabía a dioses.