Sanidad tropieza dos veces con la piedra de los test chinos fallidos

España recibirá nuevos test rápidos de coronavirus de la misma empresa que envió los anteriores test, ya retirados.

28 de Marzo de 2020
Sanidad tropieza dos veces con la piedra de los test chinos fallidos
Sanidad tropieza dos veces con la piedra de los test chinos fallidos

Ante las evidencias, el Ministerio de Sanidad tuvo que reconocer recientemente que los test rápidos que habian sido comprados a China por el ministerio de Salvador Illa eran defectuosos.

Y es que se comprobó que dichos test tenían una sensibilidad del 30%, cuando lo ideal es que superen el 80%, ya que de otra manera, muchos de ellos pueden daar como resultado falsos negativos.

Una situación vergonzosa para el Ejecutivo, que también tuvo que admitir que la cantidad de test adquiridos a Shenzhen Bioeasy Biotechnology no era de 8.000 unidades, sino de 58.000.

Sin embargo, el peor momento ante esta crisis de los test rápidos llegaba cuando la Embajada China afirmaba públicamente que el Gobierno español había ignorado sus recomendaciones, y había adquirido estos productos a través de una empresa que no tiene licencia oficial para vender productos médicos, y que por tanto, no está en la lista de proveedores recomendados por el Ejecutivo asiático.

Volver a confiar en la misma empresa

A pesar de que ya le hayan dado 'gato por liebre' y la urgente necesidad de estos test en España, uno de los países más afectados por el Covid-19, desde el Ministerio de Sanidad se la han vuelto a jugar apostando por la misma empresa china.

Así pues, será Shenzhen Bioeasy Biotechnology quien "reemplazará" sus propios test defectuosos, y hará la entrega de 640.000 nuevos test rápidos "fiables", de un nuevo modelo con las especificaciones y sensibilidad requeridas por el Ejecutivo.

"En breve tendremos estas pruebas rápidas que sí parecen tener la calidad necesaria" aseguraba el director de Emergencias, Fernando Simón, este viernes. (La denuncia de los funcionarios de prisiones: "Sánchez nos da mascarillas caducadas")

Mientras tanto, la crispación va en aumento en la comunidad sanitaria, principales destinatarios de estas pruebas rápidas de coronavirus.

"El personal de la sanidad pública afronta el fin de semana con indignación, incredulidad y agotamiento ante las últimas informaciones sobre la adquisición de test fallidos, la escasez de medios o la saturación de los centros" reconocen desde el CSIF.