Sánchez lo ha conseguido: ¡¡Los independentistas se sacan los ojos!!

La postura de ERC y JuntsxCat ante la investidura de Sánchez deja al descubierto un divorcio separatista que va a más.

Sánchez lo ha conseguido: ¡¡Los independentistas se sacan los ojos!!
Sánchez lo ha conseguido: ¡¡Los independentistas se sacan los ojos!!

Si lo que pretendía Pedro Sánchez era desgastar y desactivar al independentismo durante su mandato, va por buen camino. Sólo con su investidura para la presidencia de la nueva legislatura en el Congreso ha conseguido un divorcio total entre ERC y JuntsxCat, las dos fuerzas mayoritarias del separatismo catalán.

Divide y vencerás. De acuerdo a ese lema, Pedro Sánchez ha conseguido erosionar la cohesión independentista catalana enfrentando al partido de PUigdemont y Torra con el de Junqueras. Jxcat, que va a la baja, se mantiene en su postura de boicotear a Sánchez si no ofrece soluciones al problema catalán y abre la puerta a un referéndum de verdad. ERC, por su parte, ve las orejas al lobo y prefiere malo conocido, Sánchez, que el retorno de las derechas y el 155.

ERC sostiene que la sociedad catalana pide diálogo

El exportavoz de ERC en el Congreso Joan Tardà ha defendido este miércoles la necesidad de dibujar un escenario de "no bloqueo" ante la investidura de Pedro Sánchez para propiciar un posible diálogo sin condiciones.

Así lo ha manifestado en un mensaje en su perfil de Twitter, posición que choca con la opinión del presidente de la Generalitat, Quim Torra, que está por votar en contra de la investidura de Sánchez si no plantea una propuesta "para dar voz a Cataluña".

Según Tardà, la sociedad catalana acabará premiando a los que prioricen la conquista de un escenario de diálogo sin condiciones, que "solo puede iniciarse a través del no bloqueo y con la voluntad de alcanzar el objetivo de una solución que incorpore las demandas independentistas y no independendentistas".

El exdirigente republicano ya afeó a Torra la semana pasada que descartara un adelanto electoral sin escuchar antes la opinión de ERC, su socio en el Govern.

El rifirrafe tuvo lugar después de que Torra afirmara que no tenía "ninguna intención" de convocar elecciones cuando lleguen las sentencias a los líderes independentistas.

Torra le da la espalda a Sánchez

El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha pedido por su parte al presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, una propuesta "para dar voz a Cataluña", sin la que le ha asegurado que su posición es votar no a la investidura.

"Vuelva a la mesa del diálogo de donde no nos hemos levantado ni nos levantaremos nunca. Es con quien tienes diferencias con quien hace falta dialogar" ha escrito en una carta dirigida a Sánchez en 'La Vanguardia', donde también le ha pedido que anteponga el sentido de Estado a los intereses de partido y que no convoque unas nuevas elecciones.

"Le propongo un entendimiento basado en el respeto escrupuloso de los derechos humanos, civiles y sociales, incluido el derecho a la autodeterminación. Por que este es uno de los consensos de la sociedad catalana y se debe respetar", ha añadido Torra, que le ha afeado su gestión en el último mandato.

Torra se siente perseguido por Sánchez

Para el presidente catalán, el balance no es positivo, porque a su juicio la llegada de Sánchez ha conllevado más represión: "Nuevas causas abiertas en los juzgados a instancias de los abogados del Estado, persecución ideológica a las acciones de Gobierno en el extranjero, un control extraordinario de las cuentas de la Generalitat", y le ha reprochado no haber cumplido con inversiones en infraestructuras ni haber destinado suficiente gasto social.

Le ha recordado que "accedió a la presidencia gracias al apoyo de la mayoría de los diputados catalanes, de los grupos independentistas", en lo que ha etiquetado como un gesto de generosidad y como un voto de confianza que a su parecer no se ha visto compensado.

"Le invito a mirar lejos. Que es la mejor manera de mirar de cerca a la gente que nos ha dado su confianza", ha seguido, y le ha emplazado a pensar una solución de largo recorrido.

Con todo, ha descartado darle apoyo en la investidura si continúa transitando un espacio que "encalla, enfanga y criminaliza la voluntad política y democrática de los catalanes", así como le ha dicho, literalmente, que no se puede gobernar contra Cataluña.