Rocío Carrasco, el gran fichaje de Mediaset en estos últimos meses, ha aprovechado su regreso a los platós de televisión para contar detalles sobre su vida pasada a través de una docuserie, exclusivas sobre su entorno y para criticar y atacar a las personas con las que está enfrentadas.
En la docuserie puso el foco en Antonio David Flores, colaborador de televisión y ex guardia civil. Con su ex marido terminó hace ya más de 20 años pero en su docuserie volvió a sacar el tema del supuesto maltrato que sufrió a manos de Antonio David Flores cuando estaban juntos.
Posteriormente, Rocío Carrasco también ha cargado sin piedad contra su hija, Rocío Flores. La joven, que es colaboradora de El Programa de Ana Rosa y ex concursante de Supervivientes, también se ha llevado una dosis de críticas y ataques por parte de su madre, con la que no tiene relación alguna.
Sin embargo, de la noche a la mañana ha habido un cambio radical en Rocío Carrasco que se ha trasladado a todo Mediaset. La hija de Rocío Jurado ha tomado la decisión de no volver a hablar de Rocío Flores en un plató de televisión, algo que ha dejado muy sorprendida a toda la audiencia.
Además, los colaboradores de programas de Mediaset como Sálvame también han decidido guardar silencio sobre la hija de Rocío Carrasco. Quieren seguir los pasos de la hija de la actual mujer de Fidel Albiac y no mencionar, para nada, a la hija de Antonio David Flores por, según ellos, respeto.
Sin embargo, la realidad podría ser bien distinta ya que el silencio podría estar relacionado con una gran metedura de pata de Mediaset. En uno de los programas del corazón del grupo audiovisual se mostraron los informes psicosociales de Rocío Flores, que era menor de edad en aquel momento.
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Es un delito grave
Publicar informes psicosociales de una persona menor de edad, está tipificado en la carta de Beijing de 1985 de Naciones Unidas art 8 y en la LOPJ, art 266. Por lo tanto, ese silencio repentino por el que han apostado todos en este instante podría no ser un acto de bondad y si un toque de atención de la Fiscalía General.
En caso de seguir en la misma línea que antes, Mediaset y Rocío Carrasco podrían meterse en graves problemas judiciales por el delito cometido. Por ello, la hija de Rocío Jurado y el grupo audiovisual habrían decidido guardar silencio y 'vender' ese cambio radical de actitud como un acto de respeto y de bondad.