El fugado de Waterloo vuelca su política internacional en Rusia, tras el 'varapalo' sufrido por los independentistas en el suplicatorio europeo.
Carles Puigdemont mantiene el pulso independentista desde Waterloo, centrando todos sus esfuerzos en conseguir que el Consell per la República se convierta en un organismo fundamental y relevante dentro de la política secesionista catalana.
Un esfuerzo que, hace unas semanas, hacía que el fugado de Waterloo lanzase al 'mercado' el nuevo DNI catalán, un carné de socio del Consell con el que los asociados podrían conseguir descuentos en diversas empresas, pro-catalanistas, así como diversos beneficios sociales.
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Ahora, Puigdemont ha lanzado una nueva iniciativa dentro del Consell: la creación de un cuerpo de cónsules honorarios: un grupo de representantes del Consell per la República que, voluntaria y gratuitamente, harán de valedores del Consell ante gobiernos extranjeros.
Y el punto de inicio está claro para el ex president: Rusia debe contar, y cuanto antes, con al menos uno de estos cónsules, recuperando así la supuesta relación entre el Kremlin y el fugado de Waterloo.
Alianza con los 'enemigos' de la UE tras el varapalo del suplicatorio
El giro de Carles Puigdemont hacia Rusia no ha sido casual: y es que, tras el desencanto europeísta del fugado de Waterloo, los independentistas buscan ahora en los 'enemigos' de la Unión Europea una nueva línea de expansión internacional.
Y es que la Unión Europea parece haberle dado definitivamente la espalda al ex president, con la concesión, por parte del Parlamento Europeo, del suplicatorio que llevará a Puigdemont y a sus compañeros eurodipiutados ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) en Luxemburgo.
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"Los independentistas eran europeístas como estrategia contra España" defiende el eurodiputado de Ciudadanos, Jordi Cañas, para El Confidencial "Pero una vez que han visto que no les daban la razón empezaron a cambiar el discurso a 'La UE es un club de países decadentes'".
"Ahora acusan a la UE de antidemocrática" lamenta el de la formación naranja "El trago de haber perdido el suplicatorio ha sido muy duro para ellos".