El cambio de versión, el 'error fatal' de Rocío Flores a la hora de explicar ante los tribunales lo que sucedió aquel fatídico día.
Las confesiones de Rocío Carrasco en el docu-reportaje 'Contar la verdad para seguir viva', han conseguido desmontar la historia que, durante más de 20 años, Antonio David ha defendido en televisión.
Pero la hija de la más grande no sólo ha hablado de los malos tratos que recibió por parte de su ex marido, sino también ha querido hablar de aquel episodio en el su hija mayor le propinó una paliza que la llevó al hospital.
"Ese día Rocío me agrede y yo termino en un hospital. Es algo que se sabe, que se ha sabido públicamente" confesaba la socialité en el reportaje "Pero yo quiero decir una cosa: Rocío llega a ser verdugo porque antes ha sido víctima ¿vale? Ha sido víctima e incluso más vulnerable que yo".
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Sin embargo, madre e hija siguen sin coincidir en el relato de lo que sucedió aquella mañana ya que, tal y como ha podido saber Vanitatis, aquel 2012 Rocío Flores aseguró que la pelea comenzó cuando su madre la insultó, agarrándola del pelo, llevándola a la cocina y arrastrándola por el suelo, donde la agarró del cuello y la amenazó de muerte.
El cambio de versión hunde la credibilidad de Rocío Flores
A pesar de su demoledor relato, la nieta de la más grande cometió un grave error en sus declaraciones que acabó con toda su credibilidad ante los tribunales: y es que la versión que ofreció en un primer momento sobre la agresión de su madre fue muy distinta a la que expuso en sede judicial.
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"Relato que fue a desayunar a la cocina, que ambas discutieron por una pieza de fruta y que amas comenzaron aforcejear, señalando que su madre le 'restregó una nectarina por encima', hecho que ni siquiera refirió en su declaración inicial. También señala que su madre la tiró al suelo y la amenazó, pero no relata que la llevara hasta allí cogiéndola del pelo".
Cambios en la versión que hicieron desconfiar a los encargados del caso, y que provocó que Rocío Flores acabara siendo declarada culpable de malos tratos a su madre, Rocío Carrasco, suponiendo el fin de la relación entre madre e hija.