Rivera: "Sánchez debería haber rechazado los 21 puntos y aplicar el 155"

"Si yo fuera presidente del Gobierno y un presidente autonómico me trae esos 21 puntos para negociar en una reunión, me levanto de la mesa y aplico el 155", ha dicho Rivera.

Rivera: "Sánchez debería haber rechazado los 21 puntos y aplicar el 155"
Rivera: "Sánchez debería haber rechazado los 21 puntos y aplicar el 155"

El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, que da por hecho que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha aceptado debatir las 21 demandas que le trasladó en diciembre el presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, y ha afirmado que Sánchez debería haberlas rechazado y a continuación haber activado el artículo 155 de la Constitución.

"Si un presidente autonómico me trae esos 21 puntos..."

"Si yo fuera presidente del Gobierno y un presidente autonómico me trae esos 21 puntos para negociar en una reunión, me levanto de la mesa y me voy y le requiero que aplique la Constitución conforme al 155", ha asegurado, añadiendo que el jefe del Ejecutivo podría haber optado también por convocar elecciones.

En dos entrevistas en Onda Cero y esRadio, Rivera ha dicho que Sánchez en cambio "acepta los puntos, monta una mesa de partidos y los va a debatir", pese a que son exigencias "inaceptables para cualquier demócrata", porque "es un irresponsable y le da igual todo".

En su opinión, un presidente no puede asumir que "una parte del Estado diga que es otro Estado y quiere un mediador", como si España y Cataluña "fueran dos países en guerra", y tampoco puede aceptar que se diga que "la Policía es represora, que los jueces no son independientes o que estamos todavía en una dictadura".

"Indultos, referéndums, prevendas, privilegios para un territorio..."

Todo esto supone "asumir el marco mental de los separatistas", que, después de haber dado "un golpe de Estado", logran su objetivo de "negociar en una mesa paralela a las instituciones", ha censurado.

Los partidos independentistas, ha añadido, apuestan por esa vía porque en las instituciones "no tienen mayoría, no tienen manera de cambiar la Constitución y el derecho de autodeterminación nunca se les va a conceder".

Rivera ha indicado que Sánchez debería comparecer en un debate en el Congreso de los Diputados para explicar qué está dispuesto a hacer, ya que no se sabe si pretenden negociar "indultos, referéndums, prevendas, privilegios para un territorio...".

Movilización para poner freno al desafío separatista

Ante este "esperpento", considera que "la única salida democrática digna es ir a votar", que es lo que se le va a reclamar a Sánchez en la manifestación convocada por el PP y Ciudadanos para el próximo domingo en Madrid, donde también reivindicarán la unidad de España.

"Es una movilización que tiene que tener como nexo común el poner freno a este desafío separatista y a la deriva irresponsable en la que ha entrado el señor Sánchez", que "está traicionando los principios de la Constitución", ha destacado.

Rivera ha insistido en que esa concentración, donde habrá líderes de partidos como el PP, Cs y Vox, será, sin embargo, "una manifestación de la sociedad civil", no de formaciones políticas. "No es una cuestión de izquierda, centro o derecha, es una defensa de unos valores constitucionales" y la expresión de "un hartazgo", ha explicado.

Tras mostrar su convencimiento de que a la plaza de Colón acudirá "muchísima gente", también socialistas, ha resaltado que el rechazo a la actitud del presidente del Gobierno ante la cuestión catalana está consiguiendo "unir a españoles muy diversos".

Los insultos de Casado a Sánchez

El presidente de Ciudadanos ha incidido en la importancia de "estar unidos" en este momento y trabajar para que la manifestación sea un éxito, y por eso se ha negado a opinar sobre los insultos que el líder del PP, Pablo Casado, le ha dedicado a Sánchez, entre ellos "traidor", "felón" e "incapaz".

"Las palabras de los demás que las defiendan los demás", ha declarado, agregando que él prefiere hablar de "irresponsabilidad" y de "deriva peligrosa". En cualquier caso, considera que "las exageraciones nunca son buenas" y que en este caso la situación es lo "suficientemente grave" como para que ciertas palabras resulten innecesarias.