Aunque el acuerdo es total entre FIFA, Real Madrid, CONMEBOL, Federación Española, la AFA e incluso el Gobierno de Pedro Sánchez, el partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores que el River Plate y el Boca Juniors tienen que jugar en Madrid no cuenta con el apoyo de los dos clubs protagonistas. Ni River ni Boca quieren disputar el partido en el Bernabéu.
Ni River ni Boca están de acuerdo... por razones diferentes
Mientras la final ya ha empezado a prepararse en el Bernabéu para el 9 de diciembre, tanto River como Boca han apelado a la CONMEBOL porque no están de acuerdo con la decisión de trasladar el escenario del encuentro a territorio español.
Boca Juniors ha emitido un comunicado de prensa en el que expresa su intención de apelar contra el Tribunal de Disciplina porque después de los incidentes acaecidos cuando sus jugadores se trasladaban en autocar al estadio Monumental de River. Boca entiende que las autoridades deportivas deben darle el partido por ganado sin necesidad de jugar. Ni en el campo del River, ni en el Bernabéu ni en ningún otro lugar. Boca apuesta por no jugar el partido.
El River Plate recurre porque ve trato de favor a Boca Juniors
Por su parte, el River Plate se muestra disconforme con la resolución de la CONMEBOL de sancionarle con dos partidos internacionales a puerta cerrada y 400.000 dólares de multa. River considera injusto que no pueda disputar la final en su estadio, con su gente, ya que sus aficionados fueron vetados en el partido de ida jugado en la Bombonera de Boca. River considera una cacicada que los aficionados de Boca, a diferencia de los de River en la ida, sí puedan asistir al encuentro de vuelta si se disputa en el Bernabéu.
De cualquier forma, la decisión está tomada y ambos equipos están obligados a verse las caras en el Bernabéu el próximo 9 de diciembre a no ser que prefieran exponerse a sanciones mayores.
El recinto madridista fue elegido porque Madrid es la capital europa con más población argentina, muchos miles de argentinos residentes en España podrán también despalazarse hasta allí para animar a su equipo, y el aeropuerto y la capacidad hotelera de la ciudad responde a las necesidades del encuentro, así como el Bernabéu, un escenario mítico en la historia del fútbol mundial con un aforo digno de una final de esta naturaleza.