En Sálvame se han propuesto desmontar todo lo que José Antonio Avilés ha ido construyendo a lo largo de su trayectoria profesional.
Una trayectoria, corta, pero bastante intensa, ya que hay quien le acusa de estafador, de mentiroso e incluso de lucrarse en los peores momentos de las personas. ("Lo peor que puede hacer un periodista". ¡¡Escándalo!! Y va de José Antonio Avilés. ¿Qué ha pasado ahora?)
A cuenta de lo último, Kiko Matamoros ha desvelado que Avilés se habría aprovechado de José Roselló, padre del niño Julen que cayó a un pozo de Totalán donde perdió la vida.
De este modo, que el joven no posea el título de periodismo parece haber quedado en un segundo plano después de todo y las malas artes que están saliendo a la luz.
La cara oculta de Avilés cada vez es más visible
El joven está siendo duramente cuestionado durante estas últimas semanas en Sálvame y otros programas y es que no dejan de conocerse testimonios que habrían sido engañados por José Antonio.
De hecho, durante la tarde de ayer, Kiko Matamoros desveló otra de sus malas praxis. "Es la cosa más rastrera y más triste que he oído yo a la hora de obtener información; es repugnante", empezaba señalando.
Lo que le hizo al padre de Julen
"Él da con un familiar y consigue que este le presente al padre del niño. Entonces, él se presenta como periodista y tiene una conversación off the record con él. El padre se esponja, le cuenta una serie de cosas, etc".
"Él no sé si graba o retuvo en la memoria lo que hablaron, posiblemente grabó la conversación. La conversación la transcribe y la vende", cuenta Matamoros asegurando que se hizo con 18.000 euros al venderla. (María Patiño cuenta su secreto: "Yo también". ¿Qué pasa con el título universitario fake de José Antonio Avilés?)
"De repente, el padre de Julen ve que se ha publicado esa conversación y al cabo de unos días recibe la llamada de Avilés. Y le dice 'oye, yo no te he dado permiso para que publicaras esto ni sabía que me estabas haciendo una entrevista ni que esto se iba a vender".
De este modo José Antonio se lucró a drede de la desgracia de un padre desesperado según el relato de Kiko.
"Parece que Avilés, con la conciencia un poco remordida o para evitar que se pudiera saber el modus operandi, el cómo había conseguido la entrevista, le dice que le va a dar íntegramente el importe de la entrevista".
Así pues, "Avilés le hace llegar al padre de Julen 6.000 euros, de los cuales él declara y le quitan 1.500 Hacienda y, al parecer, ha cobrado 4.500 euros por una cosa que se vendió sin su autorización, sin su consentimiento por un importe infinitamente superior. Avilés se cubre porque, de alguna manera, ha habido un acuerdo tácito". (¡¡Desagradecido!! José Antonio Avilés 'apuñala' a sus padrinos televisivos por un puñado de euros)
Antonio Montero desveló que desde Espejo Público le invitaron a charlar sobre la entrevista y poco después recibió una oferta de trabajo para trabajar en la sección de sucesos aunque la rechazó para dedicarse al mundo del corazón.