Agentes de la Guardia Civil han localizado a una perra de una camada robada de cinco cachorros de perros American Staffordshire Terrier gracias al cotejo de muestras de ADN y la colaboración de una clínica veterinaria.
Estas pruebas nunca se habían practicado en la provincia para un caso de este tipo y han permitido detener al presunto autor del robo.
Los canes solo tenían 20 días cuando los sustrajeron de una finca de Banyeres de Mariola (Alicante) y una de las crías fue localizada posteriormente en Alcoi (Alicante).
El robo
El 30 de diciembre del pasado año, la Guardia Civil recibió una denuncia sobre un robo en su parcela, ubicada en la localidad de Banyeres de Mariola.
Al parecer, alguien había saltado el vallado perimetral de la finca, de más de dos metros de altura, y había robado una camada de cinco cachorros, ha explicado la Benemérita en un comunicado.
Se trataba de cinco cachorros de la raza American Staffordshire Terrier, considerada como potencialmente peligrosa y cuyo valor en el mercado oscila entre los 400 y los 600 euros por cachorro.
Cachorros de 20 días de vida
Estos animales, de apenas 20 días de vida, aún no habían sido destetados, por lo que, separarles de la madre podía suponer, además, un grave riesgo para sus cortas vidas.
Los agentes del Equipo ROCA de Ibi (Alicante) se hicieron cargo de la investigación.
El caso "se presentaba difícil, ya que partían prácticamente desde cero, sin ningún dato sobre la posible autoría de los hechos o sobre el paradero de los animales", ha explicado la Guardia Civil.
Debido a que el robo se produjo en fechas navideñas, una de las líneas de investigación que tomaron los agentes fue el hecho de que los cachorros pudieran ser ofertados en el mercado negro, como regalo de Navidad.
Por ello, alertaron al Colegio de Veterinarios de Alicante para que, en caso de que alguien llevara un animal de características similares a los robados a alguna de las clínicas de la zona, informara a la Guardia Civil.
Así, a finales de enero de 2020, un centro veterinario de Alcoi (Alicante) alertó de que un cliente se había personado con una perrita que, atendiendo a su corta edad, raza y morfología, podría ser una de las cinco crías robadas.
Gracias a esa información, los agentes averiguaron que esa persona que acudió a la clínica compró la perrita a un joven que le aseguró que el animal era de él y por el cual le pagó 200 euros.
Los guardias civiles mostraron la perra al dueño de la camada y este manifestó a los agentes que podría tratarse de uno de sus animales, aunque no podía asegurarlo, debido a que, evidentemente, la perra había crecido y presentaba características que no tenía con 20 días de vida.
Muestras de ADN
Cuando parecía que la investigación había llegado a un callejón sin salida, los agentes del Equipo ROCA de Ibi se plantearon una idea que, hasta entonces, no se había llevado a cabo en la provincia de Alicante: tomaron muestras de saliva, tanto de la perra localizada como de los padres de la camada y las enviaron al Departamento de Medio Ambiente del Servicio de Criminalística de la Guardia Civil, ubicado en Madrid, para que especialistas realizasen un informe pericial de cotejo de muestras de ADN y obtuviesen un perfil genético que determinara el posible parentesco entre los padres y la cría.
Finalmente, este junio los agentes recibieron el resultado del informe genético, que determinó la compatibilidad genealógica entre las diferentes muestras analizadas.
Confirmaba así que la perrita localizada en Alcoi efectivamente era uno de los cinco cachorros de la camada robada en Banyeres.
Detención
Por todo ello, la Guardia Civil ha procedido a la detención del vendedor de la cría, por ser el presunto autor de un delito de robo con fuerza en las cosas y un delito de estafa, al haber vendido la perra como si fuese de su propiedad cuando, realmente, había sido sustraída a un tercero.
El detenido, de 27 años y vecino de Cocentaina (Alicante), ya ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial, quien ha decretado su libertad con cargos, a la espera de juicio.
La investigación continúa abierta para esclarecer el paradero de los cuatro cachorros restantes.