Ha sucedido en Madrid. La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 59 años acusado de intentar quemar un prostíbulo ubicado en la calle Illescas, en el distrito madrileño de Latina, con las personas que había en su interior en ese momento.
El arrestado, de nacionalidad española y con antecedentes, había estado en el local recibiendo servicios sexuales de media hora con tres prostitutas.
Pero el cliente no quedó satisfecho y decidió tomarse la justicia por su mano como venganza. Enfadado, se fue a una gasolinera cercana situada en la Avenida de los Poblados y compró un bidón de gasolina con tres litros para regresar de nuevo al local de alterne, ubicado en el número 211 de la calle Illescas, en el barrio de Aluche.
Un taxista se sorprendió por verle con el bidón y sospechó que algo raro estaba ocurriendo. Le preguntó que si le ocurría algo grave y el detenido le dijo que iba a prender fuego al prostíbulo con la gente que había dentro.
Quería incendiar el local con las mujeres y clientes dentro
El taxista le siguió hasta el local y reaccionó llamando al 091, que envió al prostíbulo unidades Zeta sobre las 5 de la madrugada. Allí consiguieron detenerle justo después de que vaciara la garrafa con el líquido inflamable dentro del local.
Un portavoz de Jefatura Superior de Policía de Madrid ha confirmado que el hombre fue arrestado por presunta tentativa de incendio y amenazas graves, al comprobar los agentes que tenía actitud de prender fuego con las mujeres y clientes que había dentro.
Los policías encontraron a este individuo forcejeando con varias trabajadoras y apreciaron un fuerte olor a gasolina, por lo que se le intervino el bidón y se acometió su arresto.