La Guardia Civil desarticuló este lunes un grupo independentista compuesto por nueve miembros de los autodenominados comités de defensa de la república (CDR) que pretendía responder a la sentencia del Tribunal Supremo con acciones violentas.
Los detenidos, que querían ir un paso más allá y comenzar un conflicto armado contra España, fabricaron presuntamente sus propios explosivos y llegaron a ensayar su eficacia. (¡¡El grupo terrorista secesionista catalán detenido ya había probado los explosivos con los que quería atentar!!)
Según fuentes cercanas al caso, el 'Día D' tenía dos objetivos. Por un lado el Parlament, que pretendían asaltar por la fuerza y ocupar durante una semana, y por otro una casa cuartel del Instituto Armado en una localidad de la provincia de Barcelona en que los agentes viven con sus familias.
Los arrestos y registros se han precipitado tras detectarse indicios de que el grupo pretendía cometer un atentado entre el segundo aniversario del 1-O y la publicación del dictamen del Tribunal Supremo, que se espera para mediados o finales del mes de octubre. (¡¡Alta tensión!! Los españolistas se enfrentan, cara a cara, a los radicales CDR e impiden el asedio a un cuartel de la Guardia Civil)
En los primeros registros, los investigadores han localizado un laboratorio en el que los acusados ya habían mezclado termita, una sustancia explosiva que se utiliza como precursor de artefactos y que es el resultado de la combinación de aluminio y óxido metálico. También habían adquirido ácido sulfúrico y parafina.
Junto a esta serie de materiales, los agentes de la Guardia Civil encargados de los registros encontraron manuales para elaborar la termita, así como cloratita y Goma 2 (más destructivas). (¡¡Puigdemont y Torra se 'alían' con el grupo terrorista separata que planeaba hacer volar por los aires un cuartel de la Guardia Civil!!)
El objetivo de los CDR
El objetivo de los nueve detenidos por la Guardia Civil era sembrar el caos en Cataluña y poner en jaque a las fuerzas de seguridad del Estado.
Además, la ocupación del Parlament serviría para proclamar de forma unilateral la República de Cataluña y desafiar al Gobierno central nuevamente.