Después de que el sábado el independentismo se manifestase libremente en Madrid, va el portavoz de Junts per Cataluña y relaciona a España con Mussolini y Hitler. ¿Se puede ser más bruto e ignorante?
Durante la sesión de control en el Parlament, Eduard Pujol ha diferenciado entre la democracia española y la catalana, y ha acabado hablando de Mussolini, Hitler y Franco.
Pujol se ha preguntado si “¿España es una democracia? Que nadie se extrañe, viendo el juicio a los presos políticos, es normal que nos hagamos estas preguntas”. ("¡Libertad peces pacíficos!" La pancarta (legal) que ya se ve en Cataluña)
“Hay quién se pregunta si España es una democracia. Es lógico. Guardias civiles que solo recuerdan a la carta la negociación del juez al ver imágenes de lo que pasó, el show del Estado que delante de un problema político, ya lo sabe, sale por el terrado”, ha apuntado Pujol.
"Viendo todo esto hay quien sostiene que España es una democracia pero una democracia a la española. Pues los despistados, a la catalana, la democracia es respetar, es votar y también es manifestarse. Por ello el sábado más de cien mil catalanes nos movilizamos en Madrid para defender festivamente, cívicamente, el derecho a la independencia y para defender la propia democracia”, ha añadido.
Eduard Pujol relaciona a España con Mussolini y Hitler
"Una democracia que con la represión vive estresada, una democracia que desde hace muchos meses que seguramente se merece una advertencia de la Europa política. Pero claro, cuando el presidente del Parlamento Europeo, el señor Tajani, dice que Mussolini hizo cosas buenas, como hacer carreteras, hombre, da miedo", ha empezado a meter la pata hasta el fondo el portavoz de Junts per Catalunya.
"A mí me viene a la cabeza, presidente, todo de gente engominada, con bigotito, explicando que Franco hacía pantanos y que gracias a su clarividencia llegaron las vacaciones, la nevera y el seiscientos. Tajani sabe que ha patinado y sabe que los alemanes no hablan de Hitler a la ligera", prosigue.
"De hecho Tajani ha disculpado al estilo, a la manera del padre del rey del 155 que después de una cacería dijo 'lo siento, me he equivocado; no volverá a ocurrir'. Presidente, como se ha de responder, ¿cómo debemos responder ante la banalización del mal que tan oportunamente denunció Hannah Arendt? ¿Cómo podemos detener la frivolización del pasado, el pasado que no debería volver nunca?”, ha finalizado su intervención.